
BUENAS PRÁCTICAS BASADAS EN LA EXPERIENCIA DE TESTIGOS EXPERTOS (PERITOS) EN ARBITRAJE INTERNACIONAL QUE PUEDEN Y DEBEN REPLICARSE EN EL ARBITRAJE LOCAL, OTROS MÉTODOS ALTERNATIVOS DE RESOLUCIÓN DE DISPUTAS Y LITIGIOS EN GENERAL.
Autores: Edmundo Vera y Felipe Gutierrez
*Artículo escrito solamente en español
Los peritos con experiencia en arbitraje internacional a menudo son llamados para cuantificar los daños y pérdidas económicas. Los tipos de daños que un testigo experto puede cuantificar incluyen:
- Pérdida de utilidades: Este es el tipo de daño económico más común que se reclama en el arbitraje internacional. Las pérdidas de utilidades son aquellas que una parte habría obtenido de no ser por el incumplimiento contractual u otra conducta indebida.
- Costos: Esto incluye los costos en los que una parte ha incurrido como resultado del incumplimiento contractual u otra conducta indebida, como honorarios legales, honorarios de testigos expertos, gastos de viaje, mayor permanencia en obras y otros.
- Daños reputacionales: Estos son los daños sufridos por una parte en su reputación como resultado del incumplimiento contractual u otra conducta indebida.
- Inconvenientes: Estos son los inconvenientes sufridos por una parte como resultado del incumplimiento contractual u otra conducta indebida.
- Las mejores prácticas para cuantificar los daños y pérdidas económicas en el arbitraje internacional incluyen:
- Utilizar un testigo experto (perito) calificado: El testigo experto debe tener experiencia en el campo relevante, como economía, contabilidad o finanzas.
- Basar la cuantificación en datos confiables: El testigo experto debe basar la cuantificación en datos confiables, como estados financieros, datos de mercado e informes de expertos.
- Ser claro y conciso: El testigo experto debe explicar de manera clara y concisa la metodología utilizada para cuantificar los daños.
- Estar preparado para defender la cuantificación: El testigo experto debe estar preparado para defender la cuantificación frente a los desafíos de la otra parte.
Siguiendo estas mejores prácticas, las partes pueden aumentar la probabilidad de que sus reclamaciones de daños y pérdidas económicas sean exitosas en el arbitraje internacional, cuando utilizan peritos que tengan comprobada experiencia con la selección y utilización de dichas prácticas en un ambiente complejo como aquel en que se encuentran las partes, en cada situación específica.
Además de los tipos de daños mencionados anteriormente, los peritos también pueden ser llamados para cuantificar otros tipos de pérdidas, como:
- La pérdida de una oportunidad de negocio: Esta es la pérdida de la oportunidad de obtener ganancias al celebrar un acuerdo comercial que fue impedido por el incumplimiento contractual u otra conducta indebida.
- La pérdida de goodwill: Esta es la pérdida del goodwill que una empresa ha construido con sus clientes, proveedores y otras partes interesadas.
- La pérdida de propiedad intelectual: Esta es la pérdida del valor de la propiedad intelectual, como patentes, marcas registradas y derechos de autor.
Buenas prácticas para la cuantificación de daños por parte del testigo experto (perito):
A continuación, compartimos algunas buenas prácticas metodológicas utilizadas, de manera independiente y combinada, para la cuantificación de daños por parte de un perito:
- Flujo de caja descontado (DCF): El método DCF es un método para calcular el valor presente de los flujos de efectivo futuros. El método DCF se utiliza a menudo para cuantificar los beneficios perdidos al comparar un escenario impactado (fáctico: aquel considerado como el que ha incurrido un daño) con un escenario no impactado (contrafáctico).
- Enfoque de ingresos y costos: El enfoque de ingresos y costos es un método para calcular el valor de un negocio o activo. Este enfoque se utiliza a menudo para cuantificar la pérdida de una oportunidad de negocio.
- Ganancias perdidas: Las ganancias pérdidas son los beneficios que una parte habría obtenido de no ser por el incumplimiento contractual u otra conducta indebida. Las ganancias perdidas se pueden calcular utilizando el método DCF o el enfoque de ingresos y costos.
- Costos: Los costos son los gastos en los que una parte ha incurrido como resultado del incumplimiento contractual u otra conducta indebida. Los costos pueden incluir honorarios legales, honorarios de testigos expertos y gastos de viaje.
- Daños reputacionales: Los daños reputacionales son los daños sufridos por una parte en su reputación como resultado del incumplimiento contractual u otra conducta indebida. Los daños reputacionales pueden ser difíciles de cuantificar, pero los testigos expertos pueden utilizar encuestas u otros métodos para estimar el daño.
- Inconvenientes: Son los contratiempos sufridos por una parte como resultado del incumplimiento contractual u otra conducta indebida. Los daños por inconvenientes también son difíciles de cuantificar, pero los testigos expertos pueden utilizar encuestas u otros métodos para estimar el daño.
Siguiendo estas buenas prácticas, los peritos pueden aumentar la probabilidad de que sus cuantificaciones sean consideradas justas y precisas, y es probable que sean aceptadas por los tribunales arbitrales.
La cuantificación de estos tipos de pérdidas puede ser compleja y puede requerir que el perito utilice metodologías especializadas. La experiencia en la decisión de qué metodologías utilizar se adquiere con entrenamiento y experiencia, y haber vivido dichas experiencias repetidamente es la mejor manera de asegurar que un testigo experto esté preparado para enfrentar cualquier caso y brindar un valor real a sus clientes y al caso en disputa.
Descargo de responsabilidad: Es importante tener en cuenta que este texto no es un documento legal y no crea derechos u obligaciones legales. El texto es simplemente una visión general de los tipos de daños y pérdidas económicas que pueden cuantificarse por testigos expertos en el contexto del arbitraje internacional. Si tienes alguna pregunta específica sobre daños o pérdidas económicas en el arbitraje internacional, te recomendamos consultar a un abogado.